Historia del maine coon
Maine Coon
Maine Coon
Se desarrolló naturalmente en el noreste de los Estados Unidos. Aunque persisten muchas leyendas acerca de que el Maine Coon se crió a partir de gatos monteses o mapaches, son 100% gatos domésticos y descienden de los gatos traídos a Estados Unidos por los colonos.
La raza evolucionó para ser bastante grande y resistente, con un pelaje espeso y peludo. Estos rasgos eran necesarios para que los gatos sobrevivieran y prosperaran en los duros inviernos de la región. Aunque los gatos tipo Maine Coon probablemente eran conocidos en toda Nueva Inglaterra, eran especialmente populares en el estado de Maine.
Alrededor de la década de 1860, algunos granjeros comenzaron a exhibir sus preciados «gatos mapaches» en la Feria de Skowhegan, que es la feria agrícola más antigua del país celebrada consecutivamente y data de 1818. Aquí, los predecesores de la raza Maine Coon moderna de hoy compitieron por el título de Gato Coon campeón del Estado de Maine.
Una Maine Coon tabby marrón hembra llamada Cosey ganó lo que se considera la primera exposición de gatos estadounidense, celebrada en el Madison Square Garden en la ciudad de Nueva York el 8 de mayo de 1895. El primer libro genealógico y registro de razas de la Asociación de aficionados a los gatos de 1908 enumera el Coon como raza base (listado como «Maine Cats»). La raza también es reconocida por la Asociación Internacional de Gatos.
El Maine Coon fue designado como el gato del estado de Maine en 1985.
CARÁCTER/PERSONALIDAD
Se dice que tiene una disposición similar a la de un perro, el gato Maine Coon es inteligente, amigable y gentil. Relajados y seguros de sí mismos, los Maine Coon se toman todo con calma y son excelentes compañeros de juegos para los niños gentiles.
Coexisten pacíficamente con otras mascotas domésticas, incluidos otros gatos y perros amigables con los gatos. Los Maine Coons son sociables e inquisitivos, y por lo general se pueden encontrar en cualquier lugar de la casa donde haya acción, insertándose en cada situación interesante.
El Maine Coon es hablador pero no demasiado ruidoso, y se expresa a través de una variedad de maullidos, chirridos y trinos suaves y melodiosos. Son gatos bastante entrenables y disfrutan aprendiendo trucos, respondiendo bien a métodos de entrenamiento positivos y golosinas sabrosas. A pesar del viejo estereotipo, a los Maine Coons les encanta el agua y juegan en ella, se bañan en ella, sumergen su comida e incluso nadan.
CARACTERISTICAS DE LA RAZA (1)
Sin duda alguna, una de las características distintivas y más llamativas de este felino es su tamaño. El Maine Coon es un gato poderoso, robusto y muy fuerte, que deja a la mayoría de razas de gato doméstico muy por debajo en comparación con su poderío físico. Destaca en su composición física su cuerpo alargado y musculoso, su cabeza cuadrada y de tamaño medio o grande, y una cola larga y peluda.
En su cabeza de forma más bien cuadrada destacan unos ojos grandes y profundos y unas orejas erectas de gran tamaño, provistas de pelo largo que le confieren una expresión muy simpática, y también algo salvaje. Los ojos pueden ser de cualquier color, aunque generalmente se prefieren los gatos de ojos claros, pero es una cuestión de genética pura el color que tengan los ojos de los gatitos Maine Coon.
CARACTERISTICAS DE LA RAZA (2)
Las patas son también largas y robustas, musculosas y preparadas para cualquier carrera o salto. Si este animal se ejercita de la manera adecuada y gana tono muscular, se convierte en un gato elegante a la vez que majestuoso, ligero en sus movimientos a pesar de su tamaño y constitución. Algo que puede lograr muy fácilmente debido a su energía activa y a su constante deseo de jugar y de realizar todo tipo de actividades.
El estándar de la raza no marca límites en cuanto a su tamaño, aunque lo normal es que doble en longitud y casi en altura a los gatos comunes y de talla normal, como puede ser el americano de pelo corto. En cuanto al peso, también puede ser muy variable en proporción a su tamaño, aunque lo más habitual es que los ejemplares se encuentren entre los 5 y los 11 kilos, dependiendo también de su sexo y de otras variables.
La otra característica que define al gato Maine Coon es su pelaje, un manto largo y a doble capa, muy suave denso tanto en su capa exterior como en su capa interior. En zonas como la cabeza, los extremos de las patas o los hombros es mucho más corta, y en otras zonas supera la longitud media, como las patas traseras o en la cola. El color más habitual en este gato es el marrón, pero pueden encontrarse ejemplares en todos los colores, excepto tonos puntuales como el canela.
SALUD
SALUD de los gatos Maine coon
Es recomendable visitar al veterinario cada 6 o 12 meses para realizar un examen general y detectar posibles problemas de salud. Además, el profesional nos orientará para seguir adecuadamente el calendario de vacunación del gato, así como la desparasitación interna y externa que debemos realizar de forma regular. La medicina preventiva es fundamental para asegurar la buena salud del felino. Así mismo, debemos estar atentos de forma regular a su comportamiento, a sus deposiciones o a la posible expulsión de bolas de pelo, que puede prevenirse con el uso de malta para gatos.
Las enfermedades más frecuentes del Maine coon son:
Como todos los felinos, el Maine Coon puede ser propenso a determinadas enfermedades. De ahí que sea tan importante acudir con frecuencia al veterinario de manera preventiva, y mantener unos buenos hábitos de salud en general.
No obstante, esta raza puede sufrir en mayor proporción que otras, determinados problemas de salud, como la cardiomiopatía hipertrófica felina, displasia de cadera o pectus excavatum.
Lo más importante para prevenir o atajar cuanto antes un problema de salud es vigilar el comportamiento del gato y si hay cualquier cambio en sus hábitos diarios.
CUIDADOS
1. Cuidados del pelaje
Como el Maine Coon tiene el pelo largo, hay que prestar especial atención al cepillado no solo para evitar nudos y enredos, sino también para reducir la ingesta de pelos durante el acicalamiento.
Debes cepillar a tu Maine Coon de 3 a 5 veces por semana, con un cepillo adecuado para el pelo largo. Asimismo, es recomendable que le brindes regularmente porciones pequeñas de malta para gatos, para que el pelo que ingiera no sea un problema.
Los suplementos y alimentos con Omega 3 también contribuyen al brillo y la salud del pelaje.
2. Control del sobrepeso
Por su carácter perezoso los Maine Coon pueden desarrollar sobrepeso y obesidad, problema que luego desencadena otras enfermedades como pueden ser la diabetes, problemas articulatorios, digestivos, etc.
Para evitar todo esto, se hace necesaria una alimentación balanceada y una buena dosis de ejercicios. Así que, un alimento recomendado para gatos adultos es:
3. Higiene de ojos, orejas y dientes
Aunque el baño no requiera una gran frecuencia, el largo del pelaje de este minino suele acarrear ocasionalmente un exceso de cerumen en las orejas. También causa lagañas en los ojos, las cuales conviene limpiar diariamente para evitar infecciones.
Los dientes se mantendrán en buen estado con un pienso adecuado que limpie la placa, pero de cualquier modo, un cepillado habitual de los dientes no está de más.
